Sammy Teusch era blanco de burlas por sus anteojos y sus dientes. Sus padres aseguran que se contactaron al menos 20 veces con el establecimiento para denunciar lo que ocurría, pero que este ignoró sus reclamos.
El caso ha estremecido al país africano, sobre todo porque la víctima estaba a menos de 200 metros de su hogar. El autor del hecho fue detenido y aún se desconocen las motivaciones que tuvo para retener a su vecino desde 1996.